Mensajería y paquetería sospechosa
En la actualidad, es muy común recibir paquetería a domicilio, tanto en casa como en el trabajo, debido al tiempo que pasamos en estos lugares.
Aunque la Certificación OEA no prohíbe recibir mensajería y paquetería personal en el trabajo, queda a consideración y políticas de cada empresa. Es importante que todos los paquetes recibidos sean examinados a su llegada antes de ser distribuidos a las áreas o destinos correspondientes.
Independientemente del proveedor que esté entregando el paquete, es responsabilidad del Guardia de Seguridad o departamento a fin, verificar e identificar al proveedor del servicio, solicitando una identificación oficial y llevar a cabo de sus datos en el registro correspondientes.
Es indispensable que la empresa brinde capacitación a las áreas necesarias para que puedan examinar los paquetes de manera efectiva. Entre los temas de capacitación, se deben explicar las características sospechosas para que estos paquetes sean rechazados y no representen una amenaza para los empleados e instalaciones.
A continuación, se enumeran las principales características o elementos a revisar para determinar si un paquete debe ser aceptado o rechazado:
Direcciones poco claras o equivocadas, o nombre del destinatario mal deletreado.
Remitentes no conocidos o falta de remitente.
Anotaciones exteriores
Presencia de manchas aceitosas o restos de grasa en el sobre.
Olores extraños
Característicos de algunos explosivos.
Agujeros o pequeñas rasgaduras en las esquinas
Excesiva rigidez
Peso excesivo o descompensado
Sonidos metálicos
Cinta adhesiva reforzando las esquinas o solapas
Si se detecta que la paquetería y mensajería recibida es sospechosa, es importante que el responsable de la revisión notifique al departamento o autoridades pertinentes para que se realice el seguimiento adecuado.
Finalmente, se recomienda que la paquetería y mensajería que llega a la instalación se resguarde en la caseta de seguridad y no se entregue a los destinatarios hasta el final de la jornada laboral, para garantizar la seguridad de las personas e instalaciones, salvo excepciones determinadas por la empresa.
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